Este verano está siendo muy caluroso. Los termómetros no dan tregua ni siquiera de noche. Es inevitable recurrir al aire acondicionado para poder soportar el calor. Los centros de trabajo, los centros de ocio, comercios, las viviendas y también los vehículos cuentan con aire acondicionado para ofrecer confort térmico a los usuarios.
Sin embargo, el aire acondicionado tiene su lado negativo para la salud, también para la salud visual, y hay que utilizarlo con precaución y, sobre todo, con moderación.
Aire acondicionado y ojo seco
¿Cómo afecta el Aire Acondicionado a los Ojos? Las máquinas de aire acondicionado se encargan de transformar el aire del lugar, en aire frío. Esto lo hacen gracias a un gas llamado refrigerante que extrae el calor al aire. El compresor expulsa el calor del gas refrigerante. Por este motivo, el aparato de aire acondicionado tiene que tener una salida al exterior.
El aire que se obtiene es un aire seco, sin humedad, por lo que es habitual que se reseque el ambiente de la habitación después de un tiempo de funcionamiento del aparato.
El aire seco puede afectar a la salud de los ojos. La lubricación del ojo, que se produce de manera natural gracias al funcionamiento de las glándulas lagrimales, es necesaria para que el ojo esté protegido. Al parpadear, el fluido se extiende por todo el ojo, manteniéndolo limpio y evitando que se dañe la córnea.
Sin embargo, el aire seco hace que se evapore esta lubricación natural. Como consecuencia, los ojos se resecan experimentando picor, dolor y enrojecimiento.
El problema se desarrolla después de una exposición prolongada en el tiempo. No obstante, si el aire acondicionado impacta directamente en los ojos, la sensación de sequedad es más rápida.
Qué hacer para evitar el Ojo Seco
Para evitar el desarrollo del ojo seco como consecuencia del aire acondicionado, es conveniente limitar la exposición a este tipo de aire. Si no es posible, se puede reducir la sequedad del ambiente utilizando un humidificador.
Es una buena opción parpadear con más frecuencia de lo habitual para que se genere una mayor cantidad de lágrimas. Pero si, a pesar de todo, se notan los ojos secos, es conveniente pedir en tu óptica de confianza lágrimas artificiales que mejoren la lubricación de los ojos.
No obstante, existen otros factores que pueden contribuir a disminuir el flujo de lágrimas. Trabajar frente al ordenador durante horas, el uso de determinados medicamentos o cambios hormonales pueden hacer que el problema necesite del estudio de un profesional.
Disfruta del verano, huye del calor, y evita el exceso de aire acondicionado para conservar la salud de tus ojos. En Confortvisión Orense estamos comprometidos con la protección de la salud visual de nuestros clientes.
Si quieres conocer el estado de tu visión, acércate a Confortvisión Orense (C/ Orense, 7. Madrid) o pide cita en el 91 553 66 63.
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